miércoles, 25 de febrero de 2009

Cuento oriental

Hace poco me contaron un cuento.

Érase una vez un rey enojado porque en su reino habitaba un mago que era admirado por todos y que le robaba el cariño y el respeto de su pueblo. El rey lo mandó llamar a palacio y le dijo: "Voy a matarte, lo único que puede salvarte es que anticipes qué día morirás" El adivino respondió: "No sé qué día moriré, Majestad. Sólo sé que será un día antes que el de vuestra propia muerte". Desde aquel día el rey se preocupó personalmente de que el adivino tuviera una vida confortable que le permitiera llegar a muy viejo.

Moraleja: Quien domina nuestras emociones tiene el poder.

Y esto de las emociones tiene mucho que ver con nuestra toma de decisiones, incluso las que nos parecen más racionales. La persona que contó el cuento nos habló de una palabra que yo no conocía, el neuromarketing. Parece ser que los publicitarios han aplicado muy bien todas las investigaciones recientes sobre el funcionamiento del cerebro humano y que, como el adivino del cuento, dominan nuestras decisiones.


No hay comentarios:

Publicar un comentario